El mes de mayo va avanzando y las temperaturas van subiendo. Sin duda, ahora apetecen más los encuentros con la familia, tomar el sol en estos primeros días de calor… ¿Y por qué no? También nos apetece disfrutar de una comida con un vino bien fresco. ¡Toma nota porque hoy te damos algunos consejos para aprovechar al máximo este momento!
Elige el vino adecuado para maridar con platos ligeros
Cremas, embutidos, pescados a la plancha, ensaladas… Durante la primavera, y sobre todo en verano, solemos comer platos más ligeros, que incluyan ingredientes en frío. De la misma forma, tenemos más predisposición a consumir vinos frescos. Te recomendamos apostar por maridajes de recetas sencillas, que apetecen tanto estos días, con vinos blancos o rosados que maridarán perfectamente con este tipo de platos. En caso de consumir vino tinto, es muy importante servirlo a la temperatura adecuada.
Tener en cuenta la temperatura del vino
Sí, como decíamos, es muy importante servir al vino manteniendo una temperatura correcta. En el caso de vino blanco, rosado o espumoso, recuerda que deberían conservarse a bajas temperaturas, así que durante su consumo recomendamos tener a mano una cubitera con hielo para mantener una correcta temperatura del vino.
Elige un vino con cierta acidez
La acidez del vino te dará una refrescante sensación, así que uno de los aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir un vino es el grado de acidez. De hecho, su sabor fresco junto a la acidez y el recuerdo en boca a fruta roja es precisamente lo que pide el cuerpo cuando hace calor.
Tener en cuenta el volumen alcohólico
En días cálidos debemos elegir vinos que no sean demasiado alcohólicos para no favorecer la deshidratación, aunque también es recomendable tomar dos vasos de agua por cada copa de vino para evitarlo.
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